Blanca Kais, como la turmalina

Cayena.com.do

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La portada de Cayena trae hoy la entrevista que le realicé a la escritora dominicana Blanca Kais Barinas. Pueden acceder al texto completo en el sitio de la revista.

ARM: San Cristóbal te debe mucho. Allí presides el Centro Duartiano y tu labor con los jóvenes, como directora de la Casa de la Cultura, es meritoria.

BK: Bueno, espero que sea meritoria. Necesitamos relevo, a la juventud le hace falta orientación y apoyo. Uno se desespera porque quiere hacer más… Tengo dos experiencias hermosas. A veces llamo a los niños limpiabotas del parque para leerles cuentos. Un día uno de ellos se me quedó mirando muy atento, y al preguntarle por qué me miraba así, me dijo: “es que yo nunca había oído un cuento”. En otra oportunidad fui a una escuela de barrio, de bajos recursos, a dar una charla sobre la importancia de la lectura. Cuando iba por la calle, un niño me gritó: “¡Blanquita, Blanquita, ya tengo un libro!”. Él lo expresaba como si tuviera un tesoro, como si fuera un premio. Para mí resultó ser el mayor premio, ver que un niño, a quien yo incentivé a leer, ya estaba leyendo. Eso es bello.

ARM: ¿Cómo te sientes al ver crecer a tus alumnos en el mundo artístico?

BK: Es una bendición asistir a sus exposiciones, verlos iniciarse en los caminos del arte y hacerse hombres y mujeres de bien. Muchos de esos jóvenes se han destacado en la literatura, en sus actitudes ante la sociedad. El trabajo ha sido duro, difícil, pero he visto los resultados.

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Pituita en la azotea

"Utopia" by Caraban

"Utopia" by Caraban

Pienso en ti
me da pituita en la azotea
el miedo de un piano
que se desliza por el techo
la inseguridad de la vaca
que pasta en un risco
temor al precipicio
desperdicio de rosas
en un cañaveral.

— o0o —

I think of you
and I get pituita en la azotea
a fearful piano falling off the roof
the insecurity of a cow grazing on a cliff
dread of the precipice
a waste of roses
in a sugar cane plantation.

(María Victoria Carreño Montás ©)

Sus amigos y familiares la llamamos Anín, poetisa dominicana, residente en Cambita Garabito, San Cristóbal. Las palabras que el doctor Sócrates Barinas Coiscou escribió para su libro Fragmentos de una tarde –cuya versión bilingüe verá la luz en breve– no dejan lugar a dudas de quién es ella:

Este libro es una ventana donde los parámetros de la razón se quiebran para dejarnos entrar a un ámbito de sueños y llegar al interior de uno mismo. Una poetisa exquisita como María Victoria, inclinada esencialmente a cantar las pequeñas-grandes cosas del terruño, tiene entre las manos un arco de locuras y sueños para lanzarlo a quienes saben que no somos una nación de góndolas, cisnes y cigüeñas, sino de yolas, mangos y guayabas.