El giro azul de Blanquita Kais

Hoy me encontré con una entrañable amiga en la Feria Internacional del Libro Santo Domingo 2010. Blanquita Kais, escritora dominicana a quien entrevisté para la extinta revista Cayena el año pasado, me obsequió su último poemario, El giro azul. De él extraigo el siguiente poema:

CUANDO TÚ DIGAS

Hasta que tú me digas, te recuerdo,
tu voz será el espacio de mi olvido.

Estás guardado, solo, entre silencios,
desde un largo camino sin retorno.

Hace tiempo que espero tu palabra,
tanto, que no me importa si la espero.

Será cuando tú digas que te olvide
y se borre el camino y la memoria.

Blanquita, Anita (mi madre) y un servidor en el Café Bohemio.

(Ilustración: «Femininity2» by Syntithenai)

 

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Blanca Kais, como la turmalina

Cayena.com.do

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La portada de Cayena trae hoy la entrevista que le realicé a la escritora dominicana Blanca Kais Barinas. Pueden acceder al texto completo en el sitio de la revista.

ARM: San Cristóbal te debe mucho. Allí presides el Centro Duartiano y tu labor con los jóvenes, como directora de la Casa de la Cultura, es meritoria.

BK: Bueno, espero que sea meritoria. Necesitamos relevo, a la juventud le hace falta orientación y apoyo. Uno se desespera porque quiere hacer más… Tengo dos experiencias hermosas. A veces llamo a los niños limpiabotas del parque para leerles cuentos. Un día uno de ellos se me quedó mirando muy atento, y al preguntarle por qué me miraba así, me dijo: “es que yo nunca había oído un cuento”. En otra oportunidad fui a una escuela de barrio, de bajos recursos, a dar una charla sobre la importancia de la lectura. Cuando iba por la calle, un niño me gritó: “¡Blanquita, Blanquita, ya tengo un libro!”. Él lo expresaba como si tuviera un tesoro, como si fuera un premio. Para mí resultó ser el mayor premio, ver que un niño, a quien yo incentivé a leer, ya estaba leyendo. Eso es bello.

ARM: ¿Cómo te sientes al ver crecer a tus alumnos en el mundo artístico?

BK: Es una bendición asistir a sus exposiciones, verlos iniciarse en los caminos del arte y hacerse hombres y mujeres de bien. Muchos de esos jóvenes se han destacado en la literatura, en sus actitudes ante la sociedad. El trabajo ha sido duro, difícil, pero he visto los resultados.